portero con guantes puestos

Cómo elegir la talla de los guantes de portero

En esta pequeña guía describimos de una manera fácil como elegir la talla correcta de los guantes de portero bien sean para uno mismo o para comprarselos al hijo, amigo… Es muy importante elegir la talla correcta, sentirse cómodo bajo los palos es fundamental.

Las tallas de los guantes

Generalmente las tallas de los guantes son numéricas (5 – 11) aunque algunas marcas todavía utilizan letras (XS-S-M-L-XL). El problema es saber que equivalencia tiene la medida de la mano con estas tallas. Para averiguar la talla aproximada existe un sencillo método que te mostramos en esta entrada de nuestro blog:

Averigua que talla necesitas de guantes de portero

El cuidado de los guantes de portero

Como portero, independientemente del nivel en el que se juegue, es de vital importancia que todo el equipamiento esté en perfectas condiciones para jugar.

Este cuidado incluye de manera especial a los guantes. No mantener correctamente los guantes, dejándolos sucios o mojados después de los partidos, ocasiona que los materiales se vayan deteriorando y que el grip de la palma vaya a menos e incluso que se llegue cuartear y acabe rompiéndose.

Mantenimiento de los guantes

La adherencia del látex de la palma del guante se activa al humedecerla, especialmente en los guantes con palmas de alto porcentaje de látex natural.

En los guantes para tierra o con la palma combinada, no hay que humedecer la palma o en su caso hacerlo muy ligeramente, ya que estas palmas están especialmente desarrolladas para el agarre en seco.

Durante el partido o entrenamiento, es aconsejable disponer en la portería de una toalla limpia que nos permita mantener la palma de los guantes limpia y húmeda a lo largo de todo el partido.

Una vez finalizado el partido, es recomendable el lavado de los guantes con agua templada y con un jabón neutro. Para ello, se pueden poner los guantes como lo haríamos normalmente, se colocan las manos debajo del grifo, ponemos un poco de jabón neutro y frotamos, con suavidad, un guante con otro. Procedemos a aclararlos perfectamente y los escurrimos ligeramente y con mucho cuidado de no retorcerlos. Los guantes de portero no se pueden lavar en lavadora ni secar en secadora.

Secar el guante a la sombra y lejos de estufas o fuentes de calor ya que en caso contrario el calor hará que el látex se endurezca y se vuelva quebradizo, acortando su vida del mismo.

Es altamente recomendable reservar un par de guantes para los partidos que lavaremos después de cada uso para mantener las prestaciones del mismo y así alargar su vida útil.