portero bloqueando balón

Las 5 fases clave para el calentamiento de porteros de fútbol

Los porteros de los equipos de fútbol son piezas imprescindibles en el juego defensivo. Si bien hace unos años las técnicas de calentamiento para porteros estaban basadas en repeticiones continuas tocando muy poco balón, en la actualidad se recomienza realizar un entrenamiento específico con diferentes lanzamientos de balón.

El calentamiento del portero es indispensable ya que pasa parte del partido a la espera de entrar en juego para realizar las paradas. Por ello, su calentamiento previo al partido, tiene que conseguir que el portero permanezca con toda su musculatura y articulaciones preparadas, al mismo tiempo que mantiene la concentración y la motivación para permanecer dentro del partido durante los 90 minutos.

¿Cómo programar el calentamiento de los porteros de fútbol?

Lo más recomendable a la hora de iniciar el calentamiento, es poner a tono los músculos. Para ello, unos minutos de carrera continua, seguido de estiramientos de miembros inferiores, tronco y miembros superiores. Finalizaremos ésta parte del calentamiento con estiramientos articulares de hombros, codos, caderas, rodillas y tobillos.

Después de dedicarle entorno a 10 minutos a la primera parte de calentamiento, continuaríamos con ejercicios de contacto con el balón. Con un compañero ó entrenador de porteros si se tiene, realizar pases con el balón, cortos primero, y a media distancia con juego raso después aumentando la intensidad.

El juego aéreo sería la siguiente fase. Los ejercicios pueden realizarse en dos grupos: series de tiros desde 5 metros y otra tanda desde 8 metros, para adaptarse a las diferentes distancias. Por otro lado, sería bueno realizar ejercicios en paralelo a la línea de fondo y desde diferentes ángulos a la portería del campo de fútbol.

Seguidamente se trabajarán los tiros a puerta. Es interesante variar los tiros a corta, media y larga distancia, laterales y frontales. Con éstos ejercicios, se entrenarán las diferentes caídas y recepciones así como la capacidad de reacción del portero.

Los saques también son importantes en el calentamiento, ya que al fin y al cabo son la actividad que mayoritariamente realizan los porteros, y no hay que descuidarlos. Tres son los tipos de saques más comunes que se suelen realizar: los saques de suelo, saques de volea y los saques con la mano para largas distancias. Con series de 5 lanzamientos por tipo sería suficiente para un entrenamiento amateur.

Ésta es una tabla de calentamiento estándar, cada portero tendrá sus preferencias a la hora de calentar en base a sus puntos débiles y fuertes, aunque no haya que descuidar ninguno. Durante la semana previa al partido y según las necesidades del portero, se podrá entrenar diferentes aspectos como la fuerza, la rapidez o la coordinación. Pero de éstos temas hablaremos en otro post próximamente.