Si la semana pasada dedicábamos la entrada de nuestro blog a las máquinas de fitness de remo indoor, esta semana queremos explicaros como podéis realizar vuestros entrenamientos en función de tras factores: resistencia, distancia y tiempo.
Antes de comenzar, como en cualquier deporte, es muy importante realizar un calentamiento previo para que el ejercicio sea mucho más efectivo y sobre todo, se reduzca el riesgo de lesión. Un calentamiento de todo el cuerpo será el más adecuado, ya que con el remo ejercitamos tanto el tronco inferior como el superior. Por otro lado, adoptaremos una buena temperatura y ritmo corporal, y así no sufrir el temido “flato”.
Como os indicábamos la semana pasada, al subiros en la máquina de remo tenéis que tener un especial cuidado con la colocación que adoptáis, como en cualquier máquina de fitness, la posición puede determinar la aparición de lesiones o por el contrario, el correcto desarrollo de vuestra musculatura.
Aquí tienes algunos consejos.
La mayor parte de las máquinas de remo incorporan pantallas con sistemas de entrenamiento, de manera que podremos elegir e ir variando el sistema. Las máquinas de Kettler por ejemplo incluyen incluso perfiles personales, pantallas de “motivación” para seguir constantemente tu progresión. Las máquinas de DKN por ejemplo, además de estos componentes incluyen también medidores de quema de calorías. En definitiva, las máquinas de remo están totalmente equipadas para seguir tu entrenamiento y no caer en el riesgo del entrenamiento en máquina: el aburrimiento.
Para los principiantes, lo más recomendable es iniciar el entrenamiento en resistencia. La mayoría de las máquinas miden la resistencia en valores de 1 a 10, en cualquier caso, comienza con una resistencia suave durante un tiempo entorno a los 15 minutos. Entrenando tres veces por semana podrás comprobar cuál es el estado de tu cuerpo y que resistencia y tiempos mantienes sin sufrimiento. Ya en la tercera semana podrás variar el entrenamiento sobre tiempo, distancia o resistencia.
- Realiza una sesión de treinta minutos y si ya te encuentras en un nivel medio, realiza dos sesiones de 30 minutos. Alterna tandas de 15 minutos comenzando por una tanda continua a resistencia media y a un ritmo medio. Continua los siguientes 15 minutos alternando en tandas de cinco minutos la resistencia, subiendo y bajando un punto la resistencia
- Igual que la anterior, realiza una sesión de treinta o sesenta minutos dividida en dos sesiones de treinta. En vez de la resistencia alterna las distancias, o el número de remadas, aumentando poco a poco y no de forma brusca.
- En sesión de treinta o sesenta minutos, lo más sencillo es ir variando el tiempo, aumentando minuto a minuto el tiempo de las sesiones. Por otro lado, puedes realizar las sesiones variando entre minutos o cada cinco minutos el ritmo de la remada, pasando de remadas suaves a remadas rápidas.
Acompaña el ejercicio diseñando tu propia sesión de música para motivarte y ponte objetivos reales para superarte día a día.
Foto: Kettler